domingo, 26 de octubre de 2014

Que recuerdo de mis #mediciones de gallos, perros, algún loro loco y que me decís de tener que #medir unos ronquidos.

Admiten a trámite la denuncia de un vecino por el canto de los gallos en Sant Martí de Centelles.

 

El juez acepta el contencioso por vulneración de derechos fundamentales | La parte demandada es el Ayuntamiento del municipio de Osona por no haber tomado ninguna medida.

Sant Martí de Centelles. (ACN).- El Juzgado Contencioso Administrativo número 12 de Barcelona ha admitido a trámite la denuncia por vulneración de derechos fundamentales del vecino de Sant Martí de Centelles (Osona) que se queja del canto de los gallos. El Ayuntamiento, que es la parte demandada, tiene ahora cinco días para remitir al juez los informes y datos que "considere convenientes". El denunciante presentó el contencioso porque, a pesar de las diversas quejas, el Consistorio no tomó ninguna medida para acabar con el ruido de los "cuatro gallos, cinco ocas y dos perros" de otro vecino del pueblo. El Ayuntamiento puede interponer un recurso contra esta resolución.

La demanda pone de manifiesto que el canto de los gallos supera los 50 decibelios permitidos y llega hasta los 61 decibelios. El escrito considera que estos animales tienen que ser considerados como "no adecuados para tener en un entorno residencial" porque "no permiten dormir por la noche y fastidian todo el día".

El contencioso también asegura que "estos ruidos están violando sistemáticamente los derechos fundamentales invocados en la Constitución Española siendo el Ayuntamiento de Sant Martí de Centelles responsable por la falta de actividad a pesar de los constantes registros, requerimientos y quejas presentados por el demandante".

 

Quejas en el Ayuntamiento

El denunciante, Jordi Cid, presentó en el año 2013 dos quejas en el Ayuntamiento para pedir que "se tomaran las medidas necesarias para evitar estas molestias". Ante la "pasividad" del consistorio, Cid pidió una prueba de sonometría que determinó que el canto de los gallos supera los niveles permitidos por la ley.

Jordi Cid volvió a presentar el pasado 14 de octubre un escrito en el Ayuntamiento solicitando "medidas adecuadas para el cese inmediato del ruido de los cuatro gallos, cinco ocas y dos perros y el constante trino o cacareo de cinco palomas más el cacareo de un número indeterminado de gallinas".

Aquel escrito subrayaba que en caso de que el propietario de los animales se negara, "lleve a cabo el Ayuntamiento de Sant Martí de Centelles la ejecución subsidiaria en caso de incumplimiento, con la finalidad de preservar los derechos fundamentales de mi familia a la intimidad personal y familiar y a la inviolabilidad del domicilio".

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